Balsari Lab

1.

HUM SAB EK

(Somos una)

Esta exposición se inspira en las acciones de las mujeres trabajadoras de escasos recursos de la India, que han sobrevivido a la indiferencia social y estatal gracias a medio siglo de organización incesante. Hum Sab Ek (Somos una) es el grito de guerra de las casi tres millones de mujeres, miembras de la Asociación de Trabajadoras Autónomas (SEWA), que se encuentra en la confluencia del movimiento obrero, el movimiento cooperativo y el movimiento feminista.

Las instalaciones, diseñadas por miembros de SEWA y estudiantes de posgrado de Harvard, se basan en una investigación compuesta por 30 horas de relatos orales y una encuesta a más de 1.000 hogares, en la que se examina el impacto de la pandemia en la vida de las personas de escasos recursos.

La historia de la respuesta de SEWA a la pandemia es importante porque revela imaginarios alternativos de contratos sociales, obligaciones mutuas y dignidad en el trabajo. Cincuenta años de empoderamiento de las mujeres y de centrar las necesidades de los menos favorecidos en la toma de decisiones, permitieron a las mujeres enfrentarse a la mayor emergencia de salud pública de nuestro tiempo, cuando las estructuras políticas, económicas y sociales ya establecidas les fallaron. Durante la pandemia, los miembros de SEWA superaron la brecha digital, lucharon políticas estatales injustas, mitigaron la creciente inseguridad alimentaria, dirigieron campañas de vacunación, educaron a sus hijos, protegieron sus salarios e incluso lanzaron un seguro a siniestros para proteger a sus trabajadoras del calor extremo. Despojadas del lujo de tener confirmación , hicieron lo que era necesario , lo que beneficiara a los demás y lo que no perjudicara a nadie. Estas lecciones, de los más pobres entre nosotros, nos recuerdan que los nuevos paradigmas que tanto buscamos para sustituir las “reglas del juego” actuales, ya están en movimiento.

2.

Elaben Photograph

Celebración de la Política Nacional de Vendedores Ambulantes, Ahmedabad, 2004

Los vendedores ambulantes son una característica cotidiana en los paisajes urbanos y rurales de la India, llevando flores, frutas y verduras a los corazones de los barrios de toda la India. SEWA acuñó el término “Mercados Naturales” para referirse a estos mercados que evolucionan orgánicamente, a pesar de estar bajo la constante acoso policial y amenaza de desalojo. Desde 1995, la Alianza Internacional de Vendedores Ambulantes, con representación en los cinco continentes, viene pidiendo a los gobiernos de todo el mundo que elaboren políticas que reconozcan y protejan a los vendedores ambulantes. SEWA colaboró con la Asociación Nacional de Vendedores Ambulantes de la India (NASVI), y con el gobierno, para ayudar a redactar la Política Nacional sobre Vendedores Ambulantes Urbanos.

Esta eufórica fotografía capta el momento en que finalmente se anunció la política en 2004. Elaben Bhatt (1933-2022), fundadora de SEWA, comparte su alegría con sus “hermanas” (bens), Manjulaben Patelia a su izquierda, y Manaliben Shah, ahora Secretaria Nacional de SEWA, al fondo y a la derecha. Elaben señaló en sus escritos que “la organización, base de SEWA, es el proceso por el que las mujeres se unen en solidaridad unas con otras. Este proceso fortalece a cada mujer, la libera de sus miedos y crea lazos de hermandad por encima de castas, religiones, distritos, estados e incluso países.”

3.

50 años de historia

Casi tres millones de mujeres trabajadoras de la India pertenecen a la Asociación de Trabajadoras Autónomas, que comenzó como sindicato en 1972. Desde entonces, SEWA ha organizado a mujeres de escasos recursos de toda la India, buscando el “pleno empleo” para sus miembros. A través de la solidaridad, la cooperación mutua y el liderazgo de las mujeres, estas artesanas en casa, vendedoras de verduras, recicladoras de chatarra, agricultoras, obreras y cocineras han creado pequeñas empresas, establecido instituciones de microfinanciación, influido en las leyes nacionales y fundamentado  políticas internacionales. Estas acciones las han librado  del dominio estructural sobre sus vidas y les han proporcionado libertades que les permiten avanzar hacia un mejor futuro. Las mujeres de SEWA ejemplifican  enfoques alternativos que nos preparan para los improcedentes  retos que nos aguardan.

4.

Entretejidos

Durante siglos, Gujarat ha sido un centro de innovación en el tejido, el tinte y el bordado; sus tejidos se comercializaban con el mundo mucho antes de que el telar de Jacquard amenazara estos antiguos oficios. Las economías circulares que sostenían a las comunidades nómadas y rurales del árido terreno de Gujarat se desvanecieron con la llegada de la Compañía de las Indias Orientales. En el siglo XIX, la Corona británica había subyugado el subcontinente y los telares mecánicos de Ahmedabad servían a las necesidades del Imperio. La rueca o charkha resurgió en la conciencia nacional cuando encarnó el llamado de Mahatma Gandhi al autogobierno y acabó convirtiéndose en un potente símbolo de la lucha de la India por la independencia.

En los últimos años, la mecanización, la digitalización y la globalización han inundado el mercado nacional de imitaciones asequibles; tanto, que a muchos consumidores les cuesta distinguir de los más caros pero exquisitos tejidos hechos a mano. Sin embargo, los consumidores exigentes, incluidas las marcas de diseñadores mundiales, siguen apoyando y promoviendo a estos artesanos locales, muchos de los cuales trabajan desde sus casas. La interrupción de la cadena de suministro mundial en 2020 aniquiló la demanda de estas finas  artesanías, poniendo en peligro la vida de los artesanos a domicilio de toda la India.

Cada urdimbre de la base de esta exposición representa la salida, a menudo solitaria, de la infancia de una mujer para recibir las responsabilidades no solicitadas de la feminidad. La urdimbre y la trama se unen a medida que las mujeres se unen en cooperación mutua, enriqueciendo sus vidas en los numerosos sindicatos y cooperativas de SEWA. El tejido se eleva para ganar fuerza, forma y belleza hasta que la pandemia agota momentáneamente su color. La banda sin adornos lleva tres líneas que representan los tres únicos días en que el trabajo se detuvo durante la pandemia. Los dedos que bordaban blusas, estolas y bolsos aprendieron a coser hábilmente máscaras para proteger vidas y medios de subsistencia. El 70% de los hogares entrevistados recibieron máscaras de SEWA entre el 2020 y 2021.

5.

En casa

(A)

El cierre nacional del 24 de marzo de 2020 se produjo sin previo aviso y con pocos planes para acoger a las trabajadoras migrantes de la India. Habiendo perdido definitivamente sus ya precarios empleos, e incapaces de procesar los nuevos modismos de distanciamiento, aislamiento, pruebas y saneamiento, anhelaban reunirse con sus familias, a menudo a cientos de kilómetros de distancia. Las autopistas nacionales se convirtieron en vías de uno de los mayores éxodos que la India haya presenciado jamás: se calcula que 43,3 millones de inmigrantes interestatales regresaron a sus hogares en las semanas siguientes.

(B)

Se calcula que en India hay unos 600 millón emigrantes internos, entre los que las mujeres constituyen una mayoría significativa, empujadas por la tradición que exige el traslado de la novia tras el matrimonio. Más allá de los límites de las costumbres sociales, las motivaciones económicas tienden una amplia red que atrae a individuos y familias a las ciudades en la búsqueda, a menudo esquiva, de la prosperidad. Con un bajo nivel de alfabetización y escasas aptitudes para responder a las exigencias de la nueva economía urbana, los empleos que les esperan son en gran parte del sector informal, sin contratos, prestaciones ni seguridad social. Muchas viven en viviendas inestables y a menudo duermen en refugios improvisados o en las aceras.

El trabajo no reconocido de vendedores ambulantes, recicladores, cargadores, trabajadores de la construcción, cocineros, artesanos a domicilio, lecheros y agricultores alimenta el crecimiento económico de la India.

La Teen Darwaza, fotografiada en este collage, se construyó en 1415, cuando se fundó la ciudad de Ahmedabad. A lo largo de los años, decenas de mercaderes, mendicantes y nuevos regímenes atravesaron estas puertas, al igual que los emigrantes que regresaron en 2020. A pesar de la creciente inseguridad alimentaria en sus hogares, los miembros de SEWA respondieron a la difícil situación de los emigrantes que habian vuelto mediante el esfuerzo conjunto de dejar a un lado un roti de cada uno de sus hogares para alimentar a sus hermanas.

El cierre alteró el paisaje de la India. Las cuentas de Instagram celebraron la transformación de las ciudades a medida que el cielo se volvía azul y la niebla tóxica retrocedía. Lo efímero de esos momentos inspira este collage. Invita al espectador a preguntarse qué versión de Teen Darwaza desmiente su forma más auténtica.

  • Mitul Kajaria (fotografía)
  • Hiteshree Das (collage)
  • William Boles (collage)
  • Teen Darwaza, Ahmedabad, India, 2024, Fotografía original encargada para el proyecto

Vidéo:
Home Bound, 2020
Vídeo recopilación de varias fuentes de noticias
Deepak Ramola, Cambridge, MA, Estados Unidos, 2024

6.

Zona roja

En los núcleos urbanos de la India, millones de personas viven hacinadas en viviendas de una sola habitación que sirven de hogar y lugar de trabajo. Usualmente de menos de nueve metros cuadrados, estas casas albergan en promedio a cinco personas. Estos barrios marginales, rechazados, son el crisol de los sueños de la India, donde el distanciamiento físico es imposible y el social, inimaginable.

Datos imperfectos y decisiones políticas cuestionables hicieron que barrios enteros se marcaran como Zonas Rojas, y que sus habitantes se atrincheraran en su entorno. Mientras que los emigrantes regresaban a sus hogares, los niños se quedaban en casa sin ir a la escuela y las temperaturas subían, el hacinamiento -normalmente un refugio del mundo exterior- asfixiaba a sus habitantes.

En abril, la violencia doméstica iba en aumento. Salir de casa invitaba a la brutalidad policial. En SEWA, las ansiedades e incertidumbres alimentadas por una nueva enfermedad y unas restricciones vitales sin precedentes se vieron agravadas por la incapacidad de las mujeres de estar físicamente presentes unas para otras en momentos de angustia. Incluso en medio de los desastres naturales y los disturbios comunales en el estado de Gujarat, la solidaridad se había expresado primero simplemente apareciendo y dando testimonio. El aislamiento nunca había sido un remedio.

7.

Estás en silencio

(A)

En marzo de 2020, el “tiempo frente a la pantalla” ya no era un anatema, ya que recurríamos a nuestros dispositivos digitales para reanudar las conexiones sociales en un mundo físicamente distanciado. Para muchos que no habían tenido telefonos inteligentes ni habían interactuado con ellos, aprender a utilizar estos dispositivos aparentemente desalentadores se convirtió en una necesidad. Pocos días después del cierre, SEWA se conectó a Internet y enseñó a sus miembros a utilizar teléfonos inteligentes, crear cuentas, reunirse en línea, administrar encuestas y reconstruir sus redes de solidaridad y apoyo.

(B)

A finales de marzo de 2020, SEWA lanzó un programa de alfabetización financiera digital que vinculaba a los beneficiarios con el sistema financiero formal y el acceso a las transferencias digitales de efectivo que vendrían después. Cargaron 14 módulos electrónicos multilingües y educaron virtualmente a 4.188 formadores maestros en toda la India. En septiembre de 2020, se habían concedido 350 préstamos a cero interés a vendedoras ambulantes para estabilizar sus medios de vida, y en diciembre se desembolsaron otros 1.354 préstamos con un interés del 2,5%, todos los cuales han sido reembolsados desde entonces.

Reconociendo que la escuela Zoom no era factible para la gran mayoría de los niños de la India, una semana después del cierre se puso en marcha un programa digital asíncrono que incluía tareas diarias enviadas por WhatsApp. Se animó a los niños a comprometerse con su entorno familiar, explorar la historia local, participar en las tareas domésticas, completar las lecturas escolares y reciclar residuos para hacer arte. El programa se llamó Samay no Samman – Respetar el tiempo.

A finales de marzo, SEWA también puso en marcha una línea de ayuda de telemedicina que había sido utilizada por un tercio de todos los hogares encuestados. Su aplicación sanitaria Swasthya Samudaya mantenía registros de vacunación y rastreaba las razones del titubeo alrededor del tema. En la actualidad, la aplicación ofrece avisos, recordatorios y contenidos de educación sanitaria.

Esta instalación, impulsada por 338 películas individuales que se proyectan sincronizadas en estas 77 pantallas, celebra la extraordinaria tecnología digital que mantuvo unidas a las sociedades mientras la pandemia asolaba comunidades de todo el mundo. La fragmentación de la pantalla refleja la existencia fracturada de aquellos tiempos inciertos.

  • Robert McCarthy (programación)
  • Deepak Ramola (montaje de vídeo)
  • Hiteshree Das (diseño)
  • Karthik Girish (visualización de datos)
  • Vidéos fournies pour cette exposition par SEWA.

Este montaje ha sido ensamblado a partir de vídeos de reuniones en línea y programas educativos grabados durante la pandemia, en 2020 y 2021.

8.

Superdispersoras

(A)

El repentino confinamiento de marzo del 2020 dejó el suministro de alimentos de la India desorganizado. En todo el país, los productos listos de las granjas no podían llegar a los mercados locales. Las tiendas de comestibles estaban cerradas y la venta ambulante estaba prohibida. En respuesta a la creciente inseguridad alimentaria, SEWA lanzó una operación masiva de ayuda alimentaria en marzo de 2020, asegurando que los bienes esenciales y los alimentos llegaran a sus miembros. Décadas de confianza en el trabajo de SEWA se tradujeron en permisos para que pudieran viajar a través de las fronteras de los distritos. Las rutas de entrega de alimentos se duplicaron como cadenas de suministro para los artesanos a domicilio, y como redes de distribución para máscaras y campañas de salud. Los cafés Kamla de SEWA funcionaron como cocinas comunitarias, proporcionando comidas calientes a quienes carecían de acceso a los alimentos.

En las ciudades, las vendedoras ambulantes trabajaban hasta altas horas de la noche cuando se levantaba el toque de queda, corriendo a los pocos mercados mayoristas (mandis) que seguían funcionando, soportando frecuentes palizas y desalojos. A medida que aumentaba el número de casos de COVID-19, estas trabajadoras esenciales, que arriesgaban sus vidas para garantizar que los alimentos llegarán a las mesas de la India, eran difamadas por los medios de comunicación. Se les llamaba super dispersoras.

(B)

Los miembros urbanos de SEWA aprovecharon las antiguas redes de distribución de RUDI para enviar y recibir ayuda alimentaria, productos y servicios esenciales desde y hacia los pueblos.

Trabajando en tándem con miembros de otros sectores, estabilizaron las vidas y los medios de subsistencia de decenas de miles de familias.

(C)

La agricultura es la principal fuente de sustento en la India. Tres de cada cuatro trabajadores agrícolas a tiempo completo son mujeres, ya que los hombres emigran a las ciudades en busca de empleo. Sin embargo, la propiedad de la tierra por parte de las mujeres sigue siendo escasa, lo que obstaculiza el acceso al crédito, las subvenciones y los derechos y, en última instancia, frustra la capacidad de producción. Los márgenes económicos siguen siendo escasos debido a las persistentes ineficiencias del mercado, que favorecen a los comerciantes en detrimento de los productores.

Para crear sistemas de mercado agrícolas eficientes, justos e inclusivos, SEWA estableció en 2004 la Red de Distribución Rural (RUDI), que vincula directamente a los agricultores con los consumidores mediante la agregación, procesamiento y distribución de más de 30 productos, generando múltiples oportunidades de empleo a lo largo de la red. Las RUDIbens (hermanas), pioneras en la adopción de plataformas digitales, llevan una década enviando y recibiendo pedidos a través de dispositivos móviles. RUDI es ahora una empresa agroproductora autosuficiente con una facturación anual promedio de 1,2 millones de dólares.

En 2015, SEWA amplió sus operaciones para llegar a la “última milla” urbana con el lanzamiento del proyecto Kamla, que promueve comidas orgánicas, nutritivas y tradicionales de la India en barrios residenciales. El servicio de comidas y centro de formación original cuenta ahora con bulliciosos Cafés Kamla, incluso en el Indian Institute for Management, en Ahmedabad.

9.

Todos cuentan

(A)

“¿No encontramos siempre que las enfermedades de la población se deben a defectos de la sociedad?”
Rudolf Virchow
1848

En 2020, el gasto sanitario de India ocupaba el puesto 179 entre todos los países, con un 2,96% de su PIB. Las deficientes infraestructuras, la falta de rendición de cuentas y un sistema sanitario fragmentado con escasa supervisión dieron lugar a una grave gestión. Las diferencias de clase y casta en el acceso a la atención sanitaria en India no pudieron eliminarse con la colosal movilización de cilindros de oxígeno y la apresurada construcción de nuevos hospitales y unidades de cuidados intensivos. Las tasas de exceso de mortalidad relacionadas con la pandemia en la India fueron de las más altas del mundo, pero hasta la fecha siguen siendo muy cuestionadas por el gobierno.

Las inversiones de SEWA en sus comunidades durante décadas les permitieron organizar una respuesta múltiple para proteger a sus miembros. Su lema es: “¿Qué necesitan nuestros miembros? ¿Cómo beneficiará esto a nuestros miembros?” Este debería ser el lema que guíe los sistemas sanitarios de todo el mundo.

(B)

Varias instituciones académicas y estatales fallaron a su profesión al seguir promoviendo, e incluso distribuyendo masivamente, medicamentos antiparasitarios, mezclas de especias y regímenes farmacológicos caros a los cuales la mayoría de los Indios no podían acceder.. La inmensa mayoría (con una edad media de 32,4 años en 2020) no necesitaría ningún tratamiento para el COVID-19, salvo cuidados de apoyo. La estigmatización creada por la identificación pública de los hogares seropositivos al COVID-19, el miedo a ser trasladados a hospitales y centros de cuarentena y el terror de ver a los pacientes tendidos en las aceras desesperados por conseguir camas en los hospitales provocaron el pánico masivo. Los que tenían medios aumentaron inadvertidamente los precios de los medicamentos y las camas, crearon escasez y arriesgaron la ruina financiera de las masas. En nuestra encuesta, los gastos sanitarios fueron la segunda razón más común (después de los alimentos) para que la gente agotara sus ahorros o vendiera activos.

Los profesionales de la salud pública reconocen desde hace tiempo que los determinantes sociales influyen en los resultados sanitarios. En Estados Unidos, la raza, la pobreza y la edad son mediadores clave. En la India, las comunidades rurales, las personas de escasos recursos en las ciudades y las mujeres se enfrentan a las mayores barreras de acceso. Para protegerlos de la desinformación y ampliar el acceso a la asistencia durante el cierre, las organizaciones de SEWA pusieron en marcha programas de telemedicina y teleinformación en todo el país, incluidos Gujarat, Maharashtra, Rajastán, Uttar Pradesh, Bihar Madhya Pradesh, Delhi y los estados nororientales de Assam, Meghalaya y Nagaland, comunicándose con decenas de miles de miembros y sus familias a través de plataformas de reuniones en línea y WhatsApp. Las líderes de SEWA acudían a las granjas de lácteos, los centros de recogida de leche y los mercados callejeros donde trabajaban sus miembros, para ayudar a imponer el distanciamiento físico y el enmascaramiento. Se asociaron con investigadores de la Universidad de Yale para probar la eficacia de sus programas de concienciación sobre el enmascaramiento. En 2021, SEWA convirtió 11 de sus centros comunitarios existentes en Centros de Atención COVID-19 para proporcionar a sus miembros -la mayoría de los cuales vivían en viviendas densas- espacios seguros y de confianza para la cuarentena. A finales de 2024, un equipo de tres médicos en uno de los centros de telemedicina había respondido a más de 22.000 llamadas de telemedicina.

(C)

10.

La carga de la prueba

(A)

El sector de la construcción es un motor esencial del desarrollo económico de la India y la segunda fuente de empleo. Emplea a 71 millones de trabajadores y aporta el 18% del crecimiento del PIB de la India. Para 2030, se prevé que el sector de la construcción emplee a más de 100 millones de indios, dando trabajo a quienes emigran de las zonas rurales de la India en busca de empleo. El 97% de los trabajadores de la construcción carece de contratos formales, y sólo el 2,5% recibe prestaciones de seguridad social.

(B)

En el transcurso de las cinco décadas de SEWA, la India se ha urbanizado rápidamente, con más de 500 millones de personas, o el 35% de su población, viviendo en ciudades. Estos mapas que ilustran la extensión de la huella urbana de la India sólo captan una parte de la historia, ocultando la densidad, la altura y la pluralidad de colores . Más del 40% de los 21 millones de habitantes de Bombay viven en viviendas informales. Sus chabolas están establecidas muy cerca de relucientes torres de riqueza nueva, cuyos privilegiados habitantes generan y perpetúan el empleo informal en sus casas y oficinas. Los trabajadores que construyen los altísimos rascacielos de la India contemporánea se cuentan entre los más pobres, suelen ser inmigrantes y apenas pueden aspirar a un techo propio permanente. Sus lugares de trabajo tienen pocas disposiciones para proteger su salud. A falta de agua potable e instalaciones sanitarias en las obras de construcción de la capital del país, las olas de calor extremo del verano de 2024 hicieron que muchos trabajadores migrantes de Delhi regresaran a sus ciudades de origen.

Las vasijas de barro adyacentes conocidas como gullaks o gullas son alcancías tradicionales de los pobres del oeste de la India. Solo rompiéndose se puede acceder a las escasas cantidades de dinero que guardan, del mismo modo que la astronómica riqueza generada por el sector inmobiliario se construye sobre las espaldas de los trabajadores de la construcción mal pagados. Se prevé que el sector de la construcción en India alcance los 1,4 billones de dólares en 2025.

La petición de varios centenares de páginas que SEWA presentó en nombre de los trabajadores de la construcción en Gujarat se reproduce sobre el fondo tenue aquí. Es emblemática del implacable tedio burocrático que satura la vida de las personas de escasos recursos en todo el mundo.

11.

Hacia cielos más limpios

(A)

El impacto del cambio climático en la salud y los medios de subsistencia de las personas de escasos recursos se manifiesta a través de múltiples vías implacables. Los incesantes meses donde la temperaturas superan los 38 °C, tanto en el trabajo como en casa, no ofrecen tregua. Se pierden salarios porque a veces hace demasiado calor para trabajar. Los pobres también sufren agotamiento, daños corporales y fatiga mental. Luego de los calurosos meses de verano, llegan los monzones, que últimamente son impredecibles e incluso fuera de temporada, lo que altera los ciclos de las cosechas y agrava la pérdida de salarios y la inseguridad alimentaria.

El cambio climático no es una realidad lejana para los miembros de SEWA. Sus innovaciones comunitarias van desde neveras para vendedores ambulantes, tejados frescos para sus casas y estaciones de refrigeración para sus comunidades, hasta la creación de un seguro contra siniestros, parametrizado alrededor de altas temperaturas; uno de los primeros seguros de este estilo en el mundo.

¿Qué significan estas rayas climáticas?

Las franjas climáticas de la parte superior de estos paneles fueron creadas por el profesor Ed Hawkins en la Universidad de Reading en 2018. Cada franja representa la temperatura promedio media de un solo año, en relación con la temperatura promedio media del período en su conjunto. Los tonos de azul indican años más fríos que el promedio, mientras que el rojo muestra los años que fueron más cálidos que el promedio. La franja de color rojo oscuro de la parte derecha del gráfico muestra el rápido calentamiento de nuestro planeta en las últimas décadas. Las franjas climáticas que se ven aquí representan las temperaturas medias anuales promedio en Gujarat desde 1875 hasta 2022, y se crearon en showyourstripes.info.

La communauté Agariya de Kutch migre de façon saisonnière vers le vaste désert qui était autrefois relié à la mer. Ici, d’octobre à avril, ces communautés préparent d’abord – à la main – de grandes cuves, qui sont ensuite remplies d’eau saumâtre souterraine aspirée par des pompes. En 2021, les températures estivales à Kutch ont grimpé en flèche et sont restées supérieures à 120°F, ce qui en fait l’un des endroits les plus chauds de la planète. L’eau potable que les Agariyas avaient transportée dans les marais salants de l’intérieur est devenue trop chaude pour être bue, et la nourriture qu’ils avaient apportée s’est gâtée en l’absence de réfrigération. SEWA a réagi en construisant des réservoirs d’eau souterrains et en transportant des pastèques pour assurer l’hydratation et l’alimentation temporaire.

La SEWA travaille depuis longtemps avec ces communautés et y investit. De petits prêts ont permis aux travailleurs d’investir dans des pompes solaires, remplaçant les pompes diesel qui les empêchaient de gagner un salaire décent. Les panneaux solaires sont ramenés dans les villages après la récolte du sel, pour alimenter les maisons en électricité. Le passage du diesel à l’énergie solaire a atténué la pollution atmosphérique et sonore, ce qui a permis aux flamants roses de reprendre leur migration annuelle à travers le Petit Rann.

Au cours de l’été 2024, les cyclones à Dubaï ont fait la une des journaux internationaux. Le même phénomène météorologique a déversé de fortes pluies sur le sel “mûr” prêt à être récolté à Kutch, détruisant six mois de travail et les salaires de l’année.

(B)

En 2023, SEWA había colaborado con el Adrienne Arsht-Rockefeller Foundation Resilience Center y Blue Marble para crear el primer microseguro contra el calor extremo de su clase. El seguro proporcionaba transferencias de efectivo a los jornaleros cuando se alcanzan determinados umbrales de temperatura. Al no recibir los pagos previstos, los miembros de SEWA cuestionaron tanto la base de estos umbrales como los daños que pretendían evitar. ¿Por qué tres días a 110°F (43°C) eran peores que diez días a 104°F (40°C)? Si el objetivo era proteger los salarios, ¿no debería ser más bajo el umbral, ya que las frutas y verduras que vendían en carros ambulantes de sus carros expendedores se estropeaban antes?

En colaboración con investigadores de Harvard, 1.000 miembros de SEWA de ocho profesiones están realizando un seguimiento de los microambientes de sus hogares y lugares de trabajo. Actualmente, están midiendo el impacto del calor y la humedad en la fisiología humana mediante la monitorización de sus propios ritmos cardíacos, patrones de sueño y biomarcadores, algunos de forma continua, día y noche, durante 13 meses. Miles de micro sensores y biosensores ayudarán a redefinir los umbrales de alerta temprana, las condiciones de trabajo y la protección de la salud.

Los gráficos presentan los primeros resultados de 2024. Aunque las agobiantes temperaturas estivales empiezan a descender con la llegada del monzón, el aumento simultáneo concomitante de la humedad mantiene la temperatura del bulbo bulbo bulbo húmedo -un indicador sensible de cómo perciben el calor los seres humanos- en niveles muy superiores a los umbrales recomendados para el bienestar humano. Este estudio, el mayor de su estilo, reducirá los baches y las lagunas en nuestra comprensión del incierto futuro incierto al que nos enfrentamos. Es una contribución al mundo, desde algunas de las comunidades con menos recursos más pobres y más afectadas por el cambio climático.

Datos: Miembros de la Asociación de Autónomos, Análisis y Visualización: Felipe González Casabianca, Robert Meade y Hiteshree Das.

El Servicio Meteorológico Nacional de EE.UU. considera que un índice de calor superior a 105°F (40°C) es peligroso, y que por encima de 130°F (54°C) es extremadamente peligroso para la salud y el bienestar humanos.

(C)

En su libro Anubandh: Building Hundred Mile Communities, (construyendo comunidades de 100 millas) la difunta Elaben Bhatt describe lo que ella llama la economía de la crianza: “No saquea ni el capital humano ni el natural, sino que lo restaura y lo hace crecer.”

En 2022, la Asociación de Mujeres Autónomas celebró 50 años de solidaridad. Se plantó un baniano en el mismo parque en el que se reunieron por primera vez las cargadoras en 1971, tras exigir con éxito salarios más justos a los comerciantes de telas. Los miembros de SEWA expusieron su visión para los próximos 50 años: una visión de una economía más amable, inclusiva y responsable. Su mensaje se llama “Cielos limpios.”

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